Diario de una Pringadilla:

Título: Amélie
Título Original: Le Fabuleux Destin d'Amélie Poulain
Director: Jean-Pierre Jeunet
Guión: Guillaume Laurant & Jean-Pierre Jeunet
Música: Yann Tiersen
Fotografía: Bruno Delbonnel
Año: 2001
País: Francia
Duración: 120 min
Género: Fantasía, Romántica, Comedia, Realismo mágico, Drama

Protagonistas:

Audrey Tautou

Mathieu Kassovitz

Rufus

Lorella Cravotta

Serge Merlin

Jamel Debbouze

Claire Maurier

Clotilde Mollet

Isabelle Nanty

Dominique Pinon

Artus de Penguern

Yolande Moreau

Urbain Cancelier

Maurice Benichou

Sinopsis:
Amélie no es una chica como las demás. Ha vivido toda su solitaria infancia encerrada en su mente y desarrollando una increíble fantasía, para huír de una madre histérica -a la que verá morir poco después cuando le cae encima una turista suicida- y de un padre autoritario y distante, obsesionado por construír un minimausoleo para la tumba de su madre -enanito del bosque incluído-.

Como no se le permite relacionarse con otros niños -por la imaginaria enfermedad del corazón que le diagnóstica su padre-, aprende a entretenerse sola y a soñar despierta. En este ambiente se hunde en su mundo de sueños hasta que a los 22 años consigue independizarse, mudarse a un apartamento en Mont Martre y empieza a trabajar en el "Café Deux Moulins" rodeada de excéntricos personajes.

Pese a todo, sigue viviendo en su propio mundo, aislado de todo, viéndolo todo por un agujerito. Hasta que el que el 30 de agosto de 1997 -el día del accidente de Lady Di- algo ocurre que cambiará la vida de Amélie, encuentra tras un rodapié del baño encuentra una caja con los "tesoros" que guardó un niño hace cuarenta años.

Y toma una decisión trascendental. Va a intentar encontra al dueño y le devolverá la caja, si se conmueve, se relacionará con la gente y si no seguirá tal y como está para siempre.

Para ello contará con la ayuda de su vecino Raymond -el "hombre de cristal"- y se lanza a una nueva vida de "heroína de la justicia" intentando ayudar a los que le rodean de forma anónima y espectacular.

Mientras tanto, cada vez está más fascinada por Nino, un hombre excéntrico que colecciona fotografías de fotomatón y al que no se atreve a acercarse directamente.

CRÍTICA:
Ésta es una fábula mágica, luminosa, tierna y tan excéntrica como su propia protagonista. Hay que aprender a ver el mundo bajo el prisma particular de Amelie.

No creo que haya mucho más que decir. Es una de mis películas favoritas y una absoluta obra de arte. Una de esas historias que no te puedes perder.

No es sólo la historia de personajes introvertidos y excéntricos que poco a poco vuelven a abrirse al mundo. No es sólo la inolvidable música, la fotografía característica e inimitable, la magistral dirección que lo transforma todo en poesía visual, el cuento de hadas subersivo y actual, o los actores que crean unos personajes maravilloso, es el todo.

Es una fábula llena de buenas intenciones, buenos sentimientos y una cobardía tímida en enfrentarse a la vida. Una historia de autosuperación, narrada como... como algo especial.

Mis escenas favoritas:
Es complicado elegir unas escenas entre una película de culto como ésta, pero quizás -por razones de sentimiento más que de razón- éstas serían mi elección:

El vertiginoso paseo que le da al ciego.
La escena cumbre entre Georgett y Joseph. Es magistral el sonido de la cafetera.
La venganza contra el señor Collignon.
Los videos de que le manda al "hombre de cristal".
Las caras del padre cada vez que recibe una foto del enanito.

FRASES

"Son tiempos difíciles para los soñadores"
"Sin ti, las emociones de hoy no serían más que la piel muerta de las de ayer".
"Un buen apuntador listo tras los tragaluces, es lo que haría falta para que un tímido tenga la última palabra".
"Al menos usted nunca será una hortaliza, porque hasta las alcachofas tienen corazón".
"Es curiosa, la vida. Cuando eres niño el tiempo no acaba de pasar y luego sin darte cuenta tienes 50 años, y de la infancia lo unico que te queda cabe en una cajita oxidada".
"La vida no es más que un interminable ensayo de una obra que jamas se va a estrenar".
"La suerte es como el Tour de Francia, lo esperas todo el año y luego pasa rápido. Las oportunidades hay que atraparlas deprisa, sin dudar".
"La angustia por el paso del tiempo nos hace hablar del tiempo que hace".

PERSONAJES:

Protagonistas

Amélie Poulain: Es una chica de veintidós años introvertida, soñadora, tímida y solitaria. No tiene novio, intentó lo del sexo una o dos veces, pero los resultados no la impresionaron. Sin embargo ha cultivado un gusto por los pequeños placeres como: meter la mano en un saco lleno de legumbres, romper la capita de azúcar caramelizado de una crema catalana con una cuchara, verle la cara en la oscuridad en el cine a la gente, lanzar piedras en el canal de San Martín o tratar de adivinar cuántas personas hacen algo en un determinado momento.

Nino Quincampoixal: Es un chico tan raro y soñador como Amelie, ya que también pasó su infancia aislado -era maltratado por el resto de niños-. Ya adulto trabaja medio día en “el tren del horror” y el otro medio en un sex shop; además colecciona las fotos fallidas que la gente va tirando en los fotomatones. Está obsesionado para descubrir así la identidad de un hombre misterioso que aparece en muchas de ellas.

Familia

Rafael Poulain (Padre): Era médico, obsesionado por el orden y bastante distante, solía hacerle él mismo las revisiones médicas a Amelie en casa, lo que la ponía nerviosa por el desacostumbrado contacto físico.

Amandine Fouet-Poulain (Madre): Era maestra y algo neurótica, le gustaba que todo estuviese ordenado. Le daba clase a Amelie en casa porque su padre pensaba que tenía una enfermedad del corazón. Murió al caerle encima una turista que se suicidó lanzándose desde Notre Dame.

Philomene: Es una azafata amiga de Amelie, que viaja por todo el mundo y que le hace el favor a Amelie de llevarse la figura del enanito con ella para hacerle fotos. Le gusta el ruido producido por el tazón del gato en el azulejo -y al cual le gusta oír contar historias para niños

"Café des 2 Moulins”

Suzanne: Es la propietaria del café donde trabaja Amelie, se quedó coja al caerse de un caballo por culpa de pensar en un trapecista y tuvo que dejar el circo que adoraba. Cojea un poco pero nunca derrama nada. Le gusta ver a los atletas que lloran por desilusión y no le gusta que un hombre sea humillado en presencia de su hijo. Su fórmula para hacer que dos clientes se enamoren es: “Elige a dos clientes habituales y hazles creer que se gustan”.

Georgette: Es la estanquera de la cafeteria. Es hipocondriaca y tiene todas las enfermedades que oye. Odia la frase “el fruto de su vientre”.

Gina: Es la enérgica compañera de trabajo de Amelie. Suele salir habitualmente con distintos hombres, su abuela fue curandera y le gusta hacer crujir los huesos.

Joseph: Es un cliente habitual de la cafeteria. Celoso, obsesivo y acosador, siempre vigila a Gina con la que salió una vez. Siempre se sienta en la misma mesa y toma nota de todo lo que hace Gina. Sólo le gusta explotar el papel de burbujas.

Hipolito: Es otro cliente habitual de la cafeteria y escritor frustrado al que siempre le rechazan los manuscritos. Le gusta ver toreros corneados en televisión.

Vecinos:

Sr. Colignon (tendero): Es el dueño del ultramarinos del barrio. Tiene un caracter meticuloso, colérico, grosero, sarcástico y agrio que suele descargar contra Lucien, su ayudante.

Lucien: Es un chico sencillo, amable y algo lento que trabaja en el ultramarinos del barrio dónde suele ser ridiculizado por su jefe.

Madelein Wallace: Es la conserje donde vive Amelie y se pasa el día bebiendo y releyendo las cartas que le escribió su marido antes de abandonarla.

Raymond Dufayel (Hombre de cristal): Es el vecino de Amelie. Un viejo caballero con una enfermedad en los huesos que los hace tan frágiles, que lleva años sin salir ni a la puerta de su casa. Está obsesionado por Renoir y pinta una copia del cuadro "El almuerzo de los remeros" cada año, porque dice que está intrigado por la mirada perdida de una de las chicas.